viernes, 2 de mayo de 2008

Parachutes


Manda huevos que diria Trillo. Hace no más de ocho años, justo cuando iniciabamos este milenio, no había hecho aún ni un mal rapel. Me encantaba la montaña y las actividades que en ella se pueden hacer pero no había hecho más que algún que otro treking, y unas cuantas acampadas que atesoraba como únicas. Por aquel entonces, corria de forma anarquica y en verano nadaba rudimentariamente y pensaba que eso del triatlon debía ser interesante pero imposible de conciliar con mi tiempo. Había oido y visto imagenes de un deporte extraño que consistia en correr, correr!!!!, por la montaña y que se intercalaba con escalada, bici de montaña, kayak, vamos una yincana aventurera. En mi imaginación soñaba con viajar a paises dónde su primer apellido era Aventura. Pero si algo tenía claro que no iba a hacer, es que nunca, NUNCA!!!!, saltaria desde un avión para hacer caida libre y posarme suavemente en paracaidas.


Tengo una amiga, Mercedes, que lleva tiempo intentandome convencer para que hiciera un salto con ella. "Tienes que animarte, tu que eres tan aventurero como no vas a hacer esto", me decia. Muchos hemos soñado que caiamos mientras soñamos y aunque ese sueño se remonta a tiempos adolescentes, el miedo y la sensación de sin-control me incitaba a ni siquiera plantearme semejante reto. "Vente, y si no saltas al menos conoces gente nueva". Piqué con el cebo que más me gusta, conocer a alguien nuevo siempre es un aliciente.

Y resulta que además era el campeonato de España de velocidad. Me explico, se tiran a más de 4.000 metros, flipan haciendo figuritas y a 1.500 metros abren el paracaidas, como les da tiempo para aburrirse hacen algún que otro tirabuzón y a unos 100 o 200 metros del suelo se lanzan en picado para cojer toda la velocidad posible y en el último momento entrar rasante por una "puerta" donde hay unos medidores de velocidad para averiguar así el más veloz y tarado. Teniais q ver las leches q se dan.


El ambiete era genial, aunque era el campeonato de España se acercaron canadienses, yankis, franceses. Ambiente relajado en una tarde genial. Y claro, cómo no iba a saltar, cómo no me iba a sumar una nueva experiencia. asi que no lo pensé, simplemente salté.


80 segundos de caida libre para 2.500 metros. Increible!!!, ni montaña rusa, ni rapel de más de 100 metros, ni puenting ni leches. Increible!!!. Lo volveré a repetir, lo sé.

2 comentarios:

MAE dijo...

Mola eh!!!! yo que también he "picoteado" con muchas cosas la que más me ha impresionado, alucinado, .... fue el salto en paracaidas que hice en Namibia, ni te lo puedes imaginar, además de lo que viviste imagínate cayendo viendo un desierto de dunas naranjas alucinante y al borde una playa de impresión con una puesta de sol que te mueres.... en fin que es lo más bonito que he hecho de momento. Ya te enseñaré el vídeo de mi caída libre

Tengo pendiente un salto en Ampuria Brava he ido dos veces y no pudimos por la "tramontana" así que toma nota es un salto precioso

Un besete

MAE dijo...

Ah!!! y ya sabes nunca digas NUNCA!!! que seguro que está más cerca de lo que uno piensa...je, je

Más besos.