A penas ha posado pie en España y ya ha sentado cátedra el santo Padre. Entiendo que su labor sea conseguir fieles que engrosen las filas de la mejor secta del mundo, SI, secta, pero que pretenda encauzarnos o descalificarnos a quienes no seguimos patrón marcado por religión alguna ya me cansa. Me cansa el pretendido afán de determinados medios en desvirtuar la realidad y hacerse eco de comentarios que sólo insultan la inteligencia de quienes libremente hemos decidido seguir un camino si ser arropados por deidad o líder alguno.
Benedicto XVI ha lanzado un duro ataque desde la Plaza de Cibeles, donde esta tarde se ha reunido con miles de jóvenes, contra aquellos que reniegan de la religión católica para abrazar el laicismo. El Papa ha dedicado fuertes críticas a quienes "se contentan con seguir las corrientes de moda y se cobijan en el interés inmediato, olvidando la justicia verdadera, o se refugian en pareceres propios en vez de buscar la verdad sin adjetivos".
El primer párrafo tiene miga y que me perdonen los millones de fieles que esta semana aplauden a su líder. Ser ateo no es una moda, es una decisión y mucho más difícil y dura de lo que a priori pudiera pensar el si creyente (en la religión que fuere). Ser ateo, no creer en nada y tener la seguridad o si lo prefieren la Fe, tan estúpida como la contraria, de que después de esto no hay na de na, implica viajar en solitario y sin red. Implica que tus fallos y aciertos recaen sobre tu conciencia y que no hay Dios que sirva de chivo espiratorio, implica que tu noción del bien y el mal va motivado por tu educación y sentido propio (q el común se me escapa) y no por temor a que haya un Dios vengador o en su defecto un demonio que cuando menos en según que situaciones me parece más simpático. Y si, me refugio en pareceres propios, propios por supuesto pues intento pensar por mi mismo y aprender de otros muchos que se han dedicado a pensar e intentar discernir qué hacer o como ser sin apoyarse en deidades para mi inesistentes, sentando dogmas por inspiración divina y que por ser seguidos por millones de fieles no demuestran más acierto... y sino, echemos vista atrás a la historia.
En una clara alusión al creciente número de agnósticos y ateos que se cuentan en España, el Pontífice ha arremetido con inusitada severidad contra el relativismo moral que azota a Europa en general y a España en particular. "Sí, hay muchos que, creyéndose dioses, piensan no tener necesidad de más raíces ni cimientos que ellos mismos", ha asegurado. "Desearían decidir por si solos lo que es verdad o no, lo que es bueno o malo, lo justo o lo injusto; decidir quien es digno de vivir o puede ser sacrificado en aras de otras preferencias".
Está claro, Benedicto XVI, Beni para los amigos, no quiere que pensemos por nosotros mismos, duda de nuestro criterio y lo considera una amenaza (este texto habla mucho más allá del aborto y yo sólo recuerdo la de muertes que a lo largo de la historía ha habido en nombre de la iglesia y de la palabra de Dios). No soy un Dios y mis cimientos no se asientan, solo, en mi propia experiencia. Se asienta en el conocimiento de otros muchos que mi criterio o mi instinto si es que carezco de lo primero, me dice más acertado. Desconfío de quien me dice que debo hacer porque la experiencia me dice que personas así, solo quieren manipular para su propio interés y desconfío de este señor porque la historia de 2.000 años le avala. No están los tiempos como para que un iluminado (iluminado por otra parte seguramente inteligentísimo, excelentemente formado, no como los lideres políticos actuales y con una información de las cloacas históricas y actuales que sólo de imaginar el xq de su forma de actuar, me acojona) te diga cómo debes pensar y de paso en que casilla pulsar en tu declaración de la renta. Si quiere predicar que lo haga por favor, con el ejemplo. Empezando por invertir su ingente fortuna en los países del tercer mundo de los cuales tanto se apoya y terminando por dar un giro a su planteamiento si lo que quiere es liderar futuras generaciones que por propia decisión quieran creer y las cuales, yo, siempre respetaré.
Porque al menos yo como ateo, no pretendo convencer a quien no comparta mi planteamiento. Eso si, que no me intenten convencer utilizando la palabra de Dios, pues dicho mensaje ha sido desvirtuado, manipulado y mil veces inventado al menos bajo mi criterio (ya digo que escaso, pero criterio al fin y al cabo). Dejenme que filósofos, pensadores y ahora científicos me ayudeny a veces consigan aportar en mi pensamiento, permitanme tener Fe en ellos pues de sobra se que mi intelecto no llega a discernir que todo lo que cuenten pueda ser la Verdad, pero dejenme libremente elegir y me elección está clara, no quiero saber nada de imágenes, Dioses y de humanos tocados por la divinidad que sabiamente me digan qué hacer y cómo pensar. Dejenme equivocarme y aprender, permitanme enfrentarme al abismo que supone la muerte sin Dios, y disculpenme si decido vivir esta vida como la única que voy a tener.
Y no, no voy a entrar en las polémicas tan manidas estos días. La visita del Papa se ha convertido en una discusión más similar al partido de anoche y al dedo de Mauriño. Me da igual que sea o no costoso, pues estando el tema como está, me da que si ha venido, los buitres de siempre sacaran partido y alguna migaja caerá. Me preocupa más el mensaje caduco y malintencionado, me jode que me insulten y que el respeto que pide para los suyos, no lo demuestre conmigo.
El texto en negrita pertenece a la edicción digital del Mundo en el día de hoy.... como no.
4 comentarios:
No puedo estar más de acuerdo, otro que no quiere deidades (ni sustitutivos, que hay muchos) ni quiere que se las impongan.
s
Qué buen post!!!
Me ha encantado, Nacho. Suscribiría cada una de las líneas que has escrito y es que este asunto me enerva bastante.
En fin, sólo me queda apagar la tv por unos días o cambiar rápido cuando veo la imagen der "Beni" para mantenerme en "mi margen" sin posibilidad de que me crispen innecesariamente.
Ayyy, si la apostasía no fuese tan complicada de llevar a cabo... qué a gusto me iba a quedar!!! ;D
100%. Mira q yo creo q me lo has copiado...
Pues yo no.
Ni acuerdo ni en desacuerdo.
Soy creyente, no practicante.
Defiendo la visita del Papa, no pienso mover un dedo por verla, ni visitarla, entre otras cosas porque llevo varios dias fuera y no estaba (ni estoy) en Madrid.
No critico su posible coste, ni defiendo sus posibles beneficios.
Paso de lo que me digan desde el púlpito, como paso de los detractores.
Paso de las rebajas de Agosto sobre ofertas de confesión ¡Hoy por el precio de tus pecados te absolvemos del aborto!
Paso de los de la Democracia Real a golpe de provocación e imposición del laicismo.
Creo en Dios. Creo en su hijo reencarnado, hecho hombre. Con todo lo que ser hombre reporta. Así que no me cuenten milongas divinas.
Jesús promovió una forma de vida basada en la paz y el perdón. En la conviviencia y la armonia. Y supongo que tendría los mismos errores que una persona normal, lo cual incluye el amor, así que supongo que la mal referida María Magdalena sería aquella con la que compartía su vida y su lecho.
Y que fué engendrado como todo hijo de vecino, nada de palomas mensajeras ni leches.
Quiero decir con esto que defiendo mi religión, cristiana, por supuesto, que la entiendo a mi manera, de una forma quizá mas real y más palpable, que a todas luces ofendería a los más radicales y que no tiene por qué desnaturalizar el mensaje de Dios. ¡Y que nadie se moleste a estas alturas en hacerme ver otra cosa!
No escucharé mas sandeces sobre los detractores ( y en este comentario no incluyo tu magnífico post) como tampoco revisaré más veces un libro sagrado donde se supone que escribieron toda su vida de forma epopéyica y divina, tan llena de ciencia ficción, porque eso tampoco se lo cree nadie ya.
Y que cada uno se manifieste como quiera, que tenemos la suerte de que aquí si permitimos la convivencia de todas las religiones
¿O no?
Publicar un comentario